domingo, 8 de julio de 2007

MATHEMATICAL REVERENCE

Regreso de disfrutar mi fin de semana, este domingo, a bordo del turibus y conocer hermosisimos lugares de esta lúgubre urbe. Vi con decepción y vergüenza hacia mi sentimiento nacional, como cientos de estupidos se reunían en el angel de la independencia, a festejar ese "gran logro nacional", donde once retrasaditos mentales (mas bien decerebrados), pateaban un balón como locos, y lograron atinarle en 6 ocasiones, a una portería.
Decepcionado, triste y meditabundo, regresé a mi departamento, y voltearon mis ojos hacia el cielo (Nada, no hay estrellas, mas bien, aqui hace mucho que se fueron), y me parecío escuchar el sonido de las galaxias, que es tan quedo, tan impasible, tan imperfectible que siento volverme loco. Miro profundamente, ese cielo en otrora tiempo azul, y ahora café grisáceo, y pienso, ¿cuantos hombres han sido cobijados por el mismo?; si asi es, [aunque suene raro], ¿cuantos de ellos han probado un bocado de aquel azucarado cielo?, y ninguna idea llega ami cabeza, solo y tan solo palabras silentes; y ante ellos, solo me inclino, pongo mis rodillas en el suelo, y ofrezco una reverencia matemática, casi perfecta.

Agggggg, maldita sea, me siento como el licenciado Vidriera de Cervantes, [Aunque de vidrio, no soy tan frágil que me deje ir con la corriente del vulgo, las más veces engañado] que solo quiere recostarse sobre un tálamo de paja, y así evitar, por si mismo, hacerse daño. [tal vez también, llamar la atención].

Termino por fin de elucubrar sobre los anteriores hechos, tomo una plancha Oster en mis manos, la lleno de agua, y ya conectada en el enchufe, me dispongo a planchar la ropa, que tengo que vestir para toda la semana.
Saluditos a todos.

domingo, 1 de julio de 2007

Viaje en torno de mi Cráneo.

Hace mucho tiempo leí un libro muy interesante de Frigyes Karinty. llamado "viaje en torno de mi cráneo" en donde un paciente es sometido, totalmente conciente a una craneotomía extensa, y los cirujanos accidentalmente, al levantar el encéfalo con unos separadores de Farabeuf, lo inducen en un sueño muy muy profundo, y dentro de su ser ocurren sensaciones extraordinarias.
Como es ampliamente conocido, el encéfalo humano tiene tres tipos de tejido neuronal (en cuanto al contexto histológico como fisiológico y evolutivo) llamados respectivamente Arquicorteza, paleocorteza y neocorteza. La arquicorteza es la porción filogenéticamente mas antigua de nuestro organismo, origen de todo lo mas animal y salvaje dentro de nuestro ser; anatómicamente lo llaman hipocampo (con sus regiones claves, el giro dentado y el promontorio de Ammón), y es el responsable de regular muchas cosas, como el hambre, la sed y principalmente el estado de conciencia, pues una sutil y leve desviación de su eje original, induce a un ser humano, al mas terrible y profundo sueño, del cual difícilmente será despertado. Luego sigue en tiempo de evolución el paleocortex (bulbo olfatorio), que interviene en los procesos de memoria a corto plazo y por último, triunfo de nuestro cerebro la neocorteza que es la responsable del raciocinio del ser humano.
La neocorteza es la responsable de todos los giros y circunvoluciones que presenta externamente nuestro cerebro, está compuesta histologicamente por 6 capas de neuronas (a diferencia de las inferiores 3 capas del hipocampo), es la que nos da grandeza, la que nos hace inmortales, extraordinarios, hacedores de historia y la principal culpable de los conceptos creativos del ser humano como tal.
Pues bien, recordando estos basicos conceptos de neuroanatomía, yo, con una copa de mezcal de oaxaca en mi mano derecha y en la izquierda un libro de poesía de muy diversos autores, me puse a pensar y pensar y pensar (como siempre, maldita sea, ¿porque no puedo ser normal?), como es que los seres humanos se dejan llevar por cualquiera de estas tres estructuras anatómicas, siendo mas desgarradora la lucha entre la arquicorteza (irracional) y neocorteza (racional).
Pues bien amigos mios, el gran marihuano, era uno de esos seres dominado totalmente por su estructura arquicortical. Él solo pensaba en comer, dormir, orinar, y reproducirse; cualquier intento por relacionarse con el, discutir sobre algo era infructuoso, o mejor dicho, literalmente "arar en el desierto", pues dialogar con el era como querer sembrar un almendro, en las inmensas llanuras ardientes del desierto duranguense. Este ente inferior, sin embargo, solo tenía a su defensa la agresividad (por cierto, tambien dominada por la arqui y paleocorteza), y valentía ante sus enemigos (quizá molinos como Don quijote).
Si, tal vez Cervantes lo hubiera delineado bien, el marihuano era todo un quijote, todo un caballero de triste figura, tan delgado que era casi posible delinear perfectamente atravez de la piel la silueta hepática y todos los huesos de su organismo, tal cual fuesen dibujados en su epidermis (enjuta y curtida por el infernal sol que agobia aquellos lugares del norte de la república). Su cabello era escaso, mal cortado y gris; su barba crecida de 5 días, su dentadura amarilla, con solo la mitad del total de sus dientes (pues el resto lo habia perdido en riñas), su nariz incompleta, al igual que sus orejas grandes y caídas tambien lo eran. Este tipo era todo un alfeñique, un insignificante ser humano; tal vez, subhumano. El gran marihuano, en si, no merece que se cuente su vida, pues llevo su vida al abismo, y nadie lo recuerda ahora ni nadie lo recordara, solo nosotros, miembros de la fraternidad, pues pasamos miles dehoras, de insana diversión, burlandonos y riéndonos a sus costillas.
Me extendi un poco, luego posteare mas
Saluditos a todos.